Stanislaw Zaremba

1863 - 1945

Stanilaw ZarembaEl padre de Stanislaw Zaremba fue ingeniero. Zaremba asistió a la escuela secundaria en St Petersburg luego, después de graduarse, estudió ingeniería en el Instituto de Tecnología en esa ciudad. Recibió su diploma de ingeniería en 1886 y luego fue a París donde estudió matemáticas para su doctorado en la Sorbonne.

Como tema para su doctorado, Zaremba buscó desarrollarlo sobre las ideas introducidas por Riemann en 1861. Su tesis doctoral Sur un problème concernant l'état calorifique d'un corp homogène indéfini fue presentada en 1889. Zaremba hizo muchos contactos con matemáticos de la escuela Francesa en este tiempo que lo proveerían de colaboradores internacionales después de volver a Polonia. En particular colaboró con Painlevé y Goursat.

Por once años enseñó en escuelas en Francia, durante este tiempo se concentró en su investigación. El haber publicado sus resultados en revistas matemáticas francesas significó que su trabajo llegó a ser bien conocido y altamente respetado por lideres matemáticos franceses tales como Poincaré y Hadamard

Zaremba volvió a Polonia en 1900 donde se le nombró en  la Universidad de Jagiellonian en Kraków. En los años siguientes logró mucho en la enseñanza, en la escritura de libros, y organizando el progreso de la matemática en Kraków. Stanislaw Golab, un geómetra diferencial, escribió sobre la historia de las matemáticas en Polonia. Describió el estilo pedagógico de Zaremba (ver [1]):

La enseñanza de Zaremba estuvo caracterizada por el rigor absoluto y la insistencia sobre una exposición de las sutilezas de un tema. Su estilo de conferencias empleaba largas y complicadas frases, cuya entendimiento lógico llegaba a ser claro únicamente después de un examen más cercano. Disfrutaba trabajando y resolviendo problemas difíciles que atascaban a otros investigadores. Siempre tomando una vista filosófica de un problema, Zaremba combinaba intuición física con una gran erudición, un método que lo permitía conectar problemas aparentemente no relacionados.

Cuando se estableció la Sociedad Matemática de Kraków en 1919, Zaremba presidió la ceremonia inaugural y fue elegido como el primer Presidente de la Sociedad. Esta Sociedad llegó a ser la Sociedad Matemática Polaca en 1920. Por muchos años sirvió a la Sociedad como editor de los Anales de la Sociedad Matemática Polaca (Annals of the Polish Mathematical Society).

Desde épocas muy desfavorables hasta la Primer Guerra Mundial, con la recreación de la nación Polaca al final de esa guerra, la matemática Polaca entró en una era de oro. Zaremba jugó un papel crucial en esta transformación. Slebodzinski, uno de los matemáticos que trabajó para el restablecimiento de la matemática Polaca después de la destrucción Nazi de la Segunda Guerra Mundial, acentuó la importancia del papel de Zaremba en la creación de la era de oro entre las guerras (ver ejemplo [2]):

Con la manifestación de estos dos de eruditos [Zaremba y Zorawski], la matemática Polaca dejó de consumir exclusivamente pensamientos y resultados de otras personas y desde ese momento en adelante comenzó a participar activamente en el desarrollo de su propia ciencia. Las circunstancias políticas del período eran tales que, por una década o más, Stanislaw Zaremba y Kazimierz Zorawski eran los únicos representantes de la matemática Polaca en contacto con países extranjeros.

Gran parte del trabajo de la investigación de Zaremba fue en ecuaciones diferenciales parciales y en la teoría potencial. También realizó importantes contribuciones a la física matemática y a la cristalografía.

Alrededor 1905 realizó contribuciones importantes al estudio de los materiales visco-elásticos. Demostró como hacer cálculos tensoriales con valor de tensión que eran invariables para alargamientos y fueran así apropiados para el uso en cuanto a las relaciones entre la historia de la tensión y la historia de la deformación de un material. Estudió las ecuaciones elípticas y en particular contribuyó al principio de Dirichlet. En [3] su contribución es descripta como se indica a continuación:

En el trabajo del eminente matemático Polaco Stanislaw Zaremba (1863 - 1942), el problema de un desarrollo axiomático de la mecánica clásica juega un papel importante, como es bien conocido, este problema constituye parte del Sexto Problema de Hilbert. Comenzando con los trabajos de G Hamel, esta pregunta ha sido estudiada por muchos especialistas en la mecánica, matemáticas y lógica.

En[3] los autores describen la justificación axiomática de la noción de tiempo de Zaremba en la mecánica clásica en la que trabajó durante el período de 1933 a 1940. He hablado con alguien quien fue estudiante en la Universidad de Jagiellonian en Kraków durante este último período de la vida de Zaremba. Por este tiempo Zaremba estaba retirado de los deberes pedagógicos normales pero todavía venía a dar conferencias especiales y era frecuentemente visto por los estudiantes quienes le tenían un gran respecto y algo de temor. Tenía reputación de examinador duro, alguien quien esperaría muchos de sus estudiantes y quien creaba problemas difíciles para presentárselos súbitamente en los exámenes orales. Había otro lado de él, sin embargo, a pesar de esta reputación de examinador duro, Zaremba mostraba gran amabilidad y comprensión a los estudiantes quienes se acercaban al examen oral temblando y con miedo.

Lebesgue, alguien quien raramente colmó de alabanzas a sus colegas, le rindió tributo en 1930 cuando Zaremba recibió un grado honorario desde la Universidad de Jagiellonian en Kraków (ve por ejemplo [1] o [2]):

La actividad científica de Zaremba influyó tantas áreas de investigación que su nombre no puede ser desconocido por nadie interesado en las matemáticas. Sin embargo, parece que el poder de los métodos que creo, y la originalidad de su imaginación, puede apreciarse mejor por aquellos que trabajan en el área de física matemática. Allí él mostró su estilo y su nombre se imprimió para siempre.

Por la misma ocasión en 1930, Hadamard también describió las contribuciones de Zaremba (ver por ejemplo [2]):

Uno no puede evitar mencionar las ideas que él inspiró en el dominio de la investigación que pertenece a esos campos a los que la ciencia francesa del siglo presente ha dedicado el mayor esfuerzo. La profunda inducción que se le debe, ha transformado recientemente los fundamentos de la teoría potencial e inmediatamente llegó a ser el punto de partida de investigación de matemáticos jóvenes de la escuela francesa. Esta inducción, en un grado verdaderamente inesperado en ese campo, es marcada por la simplicidad y la elegancia que caracteriza las ideas profunda y pertinentemente tomadas de la naturaleza de las cosas. Y en lo que concierne a mi especialidad, por qué, como podría olvidar los espléndidos resultados en el dominio de los problemas límites y de las funciones armónicas, así como también de las ecuaciones hiperbólicas, investigar por medio de la una nueva trayectoria que abrió a lo largo de la cual el conocimiento contemporáneo seguirá en el futuro próximo.

Zaremba recibió muchos honores. Además del grado honorario de la  Universidad de Jagiellonian mencionada arriba, recibió grados honorarios de Caen y Poznan. Fue elegido para la Academia Soviética en 1925. Kuratowski escribe en [2]:

Stanislaw Zaremba es el orgullo de la ciencia Polaca.

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